Fuente: Belcanto
En Lugares de Delicados Pastos:
Filipenses 4:6 "Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias".
El afán es una condición peligrosa para las personas, atenta contra su salud y su equilibrio. Para remediar todo afán, es necesario entender que debemos confiar plenamente en Dios y entregrle nuestra vida, Él responderá en el momento oportuno. Por eso, antes de desesperarnos en medio de una situación, tomemos tiempo para orar y clamar a Dios por su respuesta, por su ayuda y favor. Levantemos oración ante el único que puede socorrernos. Que nuestra oración sea conocida por Él.
No hay comentarios:
Publicar un comentario